Encontrar una rutina de limpieza para pieles sensibles y/o deshidratadas puede generar incertidumbre y miedo. Miedo a que nuestra piel reaccione mal, a perder hidratación. Pero usando los productos correctos no hay de qué temer. Cuidar con recelo la hidratación de la piel es algo que suele ocurrir entre las personas que tienen este biotipo, sin embargo existen productos de limpieza que no solo no resecan la piel sino que colaboran en la humectación, eliminando el maquillaje y otros residuos.
La Leche de Limpieza Dermaglós contiene propiedades hidratantes además de limpiadoras. Además, arrastra todas las impurezas acumuladas durante el día, no solo el maquillaje.
¿Cómo utilizo la leche de limpieza de forma correcta?
1. Retirá primero el maquillaje de ojos con un desmaquillante bifásico específico para ojos Dermaglós.(link al producto)
2. Comenzá la acción de limpieza aplicando la Leche de limpieza Activa Dermaglós sobre el rostro, cuello y escote y retirar con discos de algodón. Si usaste maquillaje conviene realizar este paso dos veces: una para eliminar el mismo y otra para retirar restos y terminar de limpiar. Es muy importante que lo hagas con movimientos circulares ascendentes.
3. Retirá con una toalla humedecida los restos hasta que la piel se encuentre totalmente limpia.
Para finalizar la limpieza es muy importante el uso de un tónico facial porque descongestiona nuestro cutis, lo refresca y devuelve el aspecto suave y luminoso. También ayuda a mejorar la circulación promoviendo la regeneración celular de la piel. Cuando aplicamos el tónico descongestivo retiramos los restos de los limpiadores usados y otros residuos que pudieran haber quedado, además de las células muertas. Esto favorece la penetración de las cremas, lociones o geles aplicados, resultando más efectivos los tratamientos. El tónico reacondicionará la piel de tu rostro, otorgando sensación de firmeza y elasticidad, y su efecto emoliente y suavizante protegerá a tu cutis del cansancio diario.