Luego de la exposición al sol, la piel requiere un cuidado específico para recuperar su humedad, su elasticidad y su equilibrio, previniendo el fotoenvejecimiento.
El sol del verano, especialmente en las vacaciones, es una de las cosas que más se disfrutan, pero durante exposiciones prolongadas la piel va perdiendo su humedad natural, y también a veces puede enrojecerse y arder. Por eso, luego del sol, es necesario darle cuidados específicos que le brinden alivio y le devuelvan la humedad y los nutrientes que necesita.
“El calor del sol provoca la evaporación de agua de nuestro cuerpo y siempre es necesario reponerla. El uso de geles y emulsiones post solares otorga el balance hídrico adecuado, evitando la descamación excesiva. Además, no hay que olvidar que el uso de protectores solares hidratan y protegen la piel en el momento de la exposición.”, comenta la Médica Dermatóloga Mónica Maiolino, Asesora de Dermaglós.
Tips de cuidado post solar, para una piel linda y sana todo el verano:
- Antes de aplicar el gel o emulsión post solar, es importante limpiar bien la piel para eliminar restos de protector, cloro o salitre.
- Es recomendable realizar esa limpieza a través de una ducha con jabón suave y agua tibia, que además de completar la limpieza tiene un efecto relajante en la piel y permite una mejor penetración de los activos del post solar.
- Los geles son excelentes para utilizar fríos y potenciar su capacidad de brindar frescura y alivio inmediatos. Pueden colocarse en la heladera para enfriarlos.
- Geles y emulsiones post solares son parte de un cuidado integral, no es uno igual al otro, ni se reemplazan mutuamente. El gel no reemplaza la humectación de la piel, por eso es necesario hidratarla con emulsiones post solares que además aporten los nutrientes que la piel necesita.
- Mientras que el gel alivia la sensación de calor y tirantez en la piel, la emulsión brinda hidratación y restaura el equilibrio que la piel necesita.
- Y por último, si querés lograr que tu piel esté bronceada, debés protegerla de la forma adecuada para poder lograr un bronceado que no dañe tu piel.